El juez Baltasar Garzón continúa con su deseo de esclarecer la muerte de los desaparecidos por la represión franquista. En total serán 19 las fosas comunes ya identificadas que se analizarán, así como todas aquellas que durante los trabajos puedan ser encontradas. La fiscalía se ha opuesto a esta autodeclaración del juez por entender que los asesinatos provocados por el bando del General Franciso Franco ya han preescrito. Sin embargo, Baltasar Garzón asegura que se trata de crímenes contra la Humanidad y que deben ser esclarecidos y determinados sus responsables, por mucho tiempo que ya haya pasado desde que se cometieron.
Un tercio de las fosas que serán abiertas se hallan en la región de Andalucía. Una de ellas es la del poeta Federico García Lorca. En cuanto a los supuestos autores de los crímenes, Baltasar Garzón ha exigido que le presenten los certificados de defunción de hasta 35 altos cargos del gobierno de Franco, entre ellos el del propio Caudillo. El objetivo es que, si alguno de ellos continuara vivo y se demostrase su culpabilidad, respondiese ante los asesinatos.
En total, Garzón determina que entre 1936 y 1951 desaparecieron exactamente 114.266 personas a causa de la represión franquista durante y después de la Guerra Civil.Desde la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica califican esta decisión de "acto de justicia", ya que llevaban años esperando a que alguien luchara por esclarecer la muerte de sus familiares. En su página web, esta asociación muestra su agradecimiento a todos aquellos que se han preocupado por conseguir la justicia que, aseguran, merecen todos aquellos que murieron por simples causas ideológicas.
Este tema seguirá siempre vigente, ya que, al igual que ocurría en la década de los 30 y en adelante, los dos bandos estarán enfrentados ante el hecho de si aclarar la muerte de unas 150.000 personas es buscar justicia o, por el contrario, simplemente reabrir heridas.
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